viernes, 27 de noviembre de 2009

Canto en la prisión


Prisión
Fría como la soledad de la noche,
aprisiona, congela;
atrapa por entre las rejas,
incluso atrapa los sentimientos de hasta los más alocados.

La prisión se ríe, se jacta de poder.
Te coarta de caricias, de palabras furtivas, te corta las alas,
te rodea de silencio, y de ausencia.

Así como en una jaula de pajaritos,
muchos cantan penosas melodías lastimeras,
de ansias de liberación,
humedeciéndose los ojos, soñando con un futuro incierto,
vertiendo lágrimas a su charco de añoranza....como yo.


Y así, las rejas, las rejas pudieron haberme quitado todo,
pudieron hasta incluso separarme físicamente de tí.
A veces me pregunto cómo tiré al amor a la deriva, cómo no pensé
en posibles consencuencias, medición de actos, las significacias...
las brechas.
Las rejas, las rejas arrasaron con el concepto del ''nosotros''
y siempre cargaré con esa culpa.
Sin embargo, nadie podrá impedir
que tú sigas siendo tú y que yo siga siendo yo misma.
Y aquí, mi música acompaña mis sueños,
y los tormentos a mis sentido.
...y así será muchos y muchos años.


Vivo con las cadenas que me puse el ayer.
Vivo, ¡Vivo lo que yo misma sembré!

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